La princesa de hielo
Camilla Lackberg
Maeva, 2011
Tapa blanda, 271 páginas
Este es un libro que me empezó a picar la curiosidad desde hace bastante tiempo. Tuve varias oportunidades de comprarlo, pero nunca me atrevía por temor a que me decepcionara. Finalmente, me hice con este libro gracias a mi hermana que le había leído y que me le recomendó. Ella, como yo, coge cualquier libro que se le ponga de por medio. Fue gracias a ella, que me gusta tanto leer, pues no ha sido siempre así.
A R G U M E N T O
Tras muchos años de ausencia, la joven escritora Erica vuelve a su pueblo natal, donde ha heredado la casa de sus padres recientemente fallecidos. Erica decide darse un paseo por las calles donde transcurrió los primeros años de su vida, pero tras el aviso de unos vecinos, descubre que su amiga de la infancia, Alex, acaba de suicidarse. Conmocionada, inicia una investigación y descubre que Alex estaba embarazada. La historia da un nuevo giro cuando la autopsia revela que su amiga no se suicidó sino que fue asesinada. La policía detiene al principal sospechoso, Anders, un artista fracasado que mantenía una relación especial con la víctima.
R E S E Ñ A
No creáis que la sinopsis es tan simple como la que cuentan. Eso era lo que a mí me hacía echarme atrás. Pero comencé a leer y como siempre digo. Una buena historia es la que te atrapa y no te deja soltarte hasta la última página.
En este libro nada es lo que parece .Y buena cuenta de ello da Erica, la protagonista, y nuestra narradora en la historia. Con ella volveremos a su pueblo para encontrar un lugar tranquilo donde escribir su siguiente novela. Aunque no es eso, ni mucho menos, con lo que nos encontramos. La muerte de una amiga de la infancia la hará querer saber más sobre la verdad acontecida. En nombre de la amistad que le unió a Alex Wijner, la víctima, comenzará a acercarse a su familia y asistirá a la comisaría, donde se encontrará con Patrick Hedstrom, un amigo de la infancia que estaba enamorado de ella, y con el que la chispa del amor surgirá.
Por su parte, nuestra protagonista aprovecha las circunstancias para escribir sobre el asesinato y la resolución del mismo. Una manera de atrever a escribir una novela de cosecha propia, puesto que hasta ahora solo había escrito autobiografías de escritoras famosas.
Irá conociendo a la familia de Alex, sus padres y su hermana, la oveja negra de la familia; también, a la familia más rica del pueblo, cuya matriarca Nelly demuestra una vez más que con el dinero todo tiene solución, su hijo Jan, que vive en el sótano de la mansión con su mujer y que lleva con mano firme los negocios de la familia, esperando un día heredar todo, a la madre de Anders, el sospechoso de la muerte de Alex, un borracho que ha pasado por la vida sin pena ni gloria. ¿De verdad Anders es el verdadero responsable de la muerte de Alex?
Descubriremos que no. La protagonista tendrá que enfrentarse al descubrimiento de que Dan, su mejor amigo, había estado manteniendo una relación con Alex. Esto pondrá en la cuerda floja la relación de Dan con su mujer Pernilla.
Erica, a su vez, tendrá que enfrentarse a la titánica tarea de decidir si vender la casa familiar, cosa con la que no está muy segura, pero con la que su cuñado sí está. Su cuñado, abogado de profesión, da la imagen de un respetable hombre de familia con mujer y dos hijos, aunque la verdad es otra muy diferente. Ana, la hermana de Erica, vive asustada esperando la próxima paliza. Soporta estoicamente todo lo que la viene encima por el bien de sus hijos y porque hasta ahora él había sido un buen padre. ¿Qué pasará cuando el marido de Anna cruce esa línea?
En este libro hay más de un sospechoso y siempre parece que alguien pueda tener un motivo oculto para matar a Alex. La pareja formada por Erica y el oficial de policía Patrick Hedstrom se encargarán, juntando piezas, de sacar a la luz toda la verdad, por dolorosa que sea.
